Comercio justo, el objetivo ético de Weleda

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La pasión por la naturaleza y el respeto por el ser humano son la razón de ser de Weleda desde su creación, en 1921. Por eso, el comercio justo sigue siendo uno de sus objetivos. Aquellos ingredientes que no pueden producir ellos mismos -recordemos que el 100% son naturales- provienen de forma ética de socios en todo el mundo.

La granada de Turquía y el aceite de Argán de Marruecos, protagonistas de su gama de Cuidado Facial Reafirmante y Antioxidante Intensivo, son dos de los últimos ingredientes en sumarse a la filosofía del comercio justo. La marca mantiene otros proyectos similares para recolectar sésamo en México, almendra dulce en España, árnica en Rumanía o lavanda en Moldavia.

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Crema de día de la línea reafirmante y antioxidante de Weleda.

De este modo, Weleda garantiza unos ingresos básicos a sus proveedores. Y no solo eso. La marca también se compromete a mantener contratos a largo plazo, lo que facilita una planificación fiable para ambas partes. Además, se concede a los colaboradores otra certificación de comercio justo para que puedan comercializar sus materias primas a mayor escala.

Granadas de Turquía

Las granadas, ingrediente esencial de la última línea facial de Weleda, proceden de cultivos biológicos de granjas de Turquía. Estos agricultores, con los que se cierran contratos de comercio justo, trabajan de forma sostenible, orgánica y biodinámica. Así, se garantiza la máxima pureza de la granada empleada en las fórmulas.

De las semillas de su fruto, se extrae un valioso aceite rico en ácidos grasos esenciales, vitaminas y antioxidantes naturales. Entre sus efectos: regenera la piel al estimular la renovación celular y disminuye la proliferación de radicales libres. Es decir, frena el envejecimiento prematuro.

Aceite de argán marroquí

El otro ingrediente estrella de la gama Reafirmante y Antioxidante es el aceite de argán biológico. Sus propiedades son bien conocidas: hidrata la piel en profundidad, regenera los daños y alivia la inflamación cutánea. Weleda lo obtiene a través de una compañía suiza-marroquí llamada Sidi Yassine. Esta compañía se centra en la sostenibilidad a largo plazo, desde una perspectiva ambiental, económica y social.

La colaboración garantiza un ingreso estable y un salario justo para más de 500 cosechadores, el 95%de ellos mujeres. De hecho, para la población bereber, el argán se ha convertido en una fuente de ingresos casi indispensable.

Weleda está acreditada por la Union for Ethical BioTrade que asegura el comercio justo, el uso responsable de los recursos naturales, la conservación de la biodiversidad y el desarrollo sostenible. Además, sus productos están certificados por NaTrue, sello de calidad más exigente para la cosmética bio.

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